Tienes un problema o conflicto con alguien, lo mejor es hablarlo, sin embargo no sabes por donde empezar, qué decir o cuando has ido, no se llega a mucho. ¡Pues estas en el lugar correcto! Bienvenido a la guía definitiva para tener conversaciones incómodas.
Si esto te resuena, dame un minuto, quiero compartir contigo algunos puntos importantes para que esa conversación te lleve a soluciones al problema.

1 – Cuando describas la situación,
habla únicamente de las cosas comprobables, aquello que ha sucedido y una tercera persona podría ver, escuchar, leer, etc. Deja por fuera juicios de valor, suposiciones, evaluaciones e interpretaciones. Adentrarnos en estos últimos puntos suele llevar a desviarse del tema para discutir sobre si esto es verdad o no, sobre otras cosas que han sucedido antes, etc.

No: “No viniste a la hora, no te importa esta relación, ya van mil veces que haces esto”

Si: “Quedamos a las 5 de la tarde y llegaste a las 6, también paso otras tres veces que has llegado tarde”

2 – Cuando expreses como esto te hace sentir o lo que te hace pensar, dilo así, “me hace sentir”, “me hace pensar”,
no lo digas como una realidad pues estaríamos cayendo en el problema anterior, sin embargo tu experiencia viviéndolo así es real.

No: “Es una vergüenza, ni siquiera te importa esta relación”

Si: “Eso me hace sentir mal y triste, en ocasiones me hace pensar que no te importa la relación”

3 – Expresa claramente lo que necesitas cambiar, no lo dejes al aire o la interpretación. La persona interesada en el cambio eres tu, has todo lo posible para que suceda.
Dilo de forma clara y concreta. Y por ende, cuando decidas tener una conversación “incomoda” hazlo con un objetivo, para lograr cambiar algo. Si tu único objetivo es que la otra persona sepa como te sientes, esta bien, pero no esperes ningún cambio.

4 – No pidas cambios de emociones, y a ser posible también evita pedir “cambios de actitud”. No siempre se puede ser super exactos, pero mi recomendación general es que pidas
cambios de conducta. Una persona no puede cambiar como se siente, imagina que estas molesto y te digan “no te molestes”, que estas nervioso y te dicen que dejes de ser tan nervioso, se siente injusto e invalidante, incluso como un ataque. Esto va a llevar a discusiones alternas y el objetivo se fue de nuevo por la ventana.
Por otro lado, los cambios de actitud llegan a ser ambiguos y poco claros en ocasiones, por ejemplo “Quisiera que fueras mas comprensivo”, para algunos esto bastara, pero para otro se quedaran “¿Y cómo hago eso?” “¿Cómo es ser más comprensivo?”.
Lo mejor es pedir cambios de conducta, algo que se puede modificar y que le dice a la persona de forma concreta qué cambiar.

No: “Quiero que seas más respetuoso conmigo”

Si: “Cuando hable de mi enfermedad quisiera que no hagas bromas, preferiría que me preguntes como estoy o si necesito algo”
Nota que en este ultimo ejemplo incluso le dimos una conducta alternativa a practicar, esto le va a facilitar las cosas, lo cual aumenta la probabilidad de que se logre el cambio que buscamos.

5 – Indica las
consecuencias positivas y negativas de hacer o no hacer caso a la petición. Se claro con esto pues aquí podría estar la motivación para hacer el cambio.

No: “Si no lo haces esta bien, pero me gustaría si es posible…”

Si: “El que llegues tarde me hace dudar de si salir contigo, hay varias veces que no he querido aceptarte la salida por eso, si sigue así, puede que ya no nos veamos más. Por otro lado, si llegas a tiempo podríamos salir más veces y divertirnos juntos, te lo agradecería mucho y podríamos pasarla mejor”

6 – Mantente en tu petición. Si la conversación se desvía o te atacan con otros temas, regresa a tu petición. Si lo que te dicen es verdad, puedes
aceptarlo y proponer hablarlo después

No: “Eso que dices ni al caso, no entiendo porque lo traes ahorita, además tu tampoco-“

Si: “Es verdad que he hecho eso, si quieres podemos hablarlo después, pero en este momento yo necesito que-“

7 – Quédate abierto a negociar. Tal ves la persona no puede darte lo que quieres pero esta abierta a otras opciones. Si evalúas que la relación (amistad, amorosa, laboral, etc.) vale la pena,
quédate abierto a negociar.
También te recomiendo la guía para pedir cosas –
DEARMAN-, notaras que es muy similar:
Tambien te puede interesar